Por María Luisa Aldana Tanús, Lic. Relaciones Internacionales, UNAM, México.
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Cita sugerida: Aldana Tanús, María Luisa (16 de septiembre 2024). Comercio Electrónico en América Latina: ¿una herramienta para lidiar con el ‘Techo de Cristal’? [Columna de opinión]. Centro de Estudios Estratégicos de Relaciones Internacionales. URL: https://bit.ly/Op-MLAT
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Haciendo referencia a las barreras invisibles pero reales que impiden a ciertos grupos alcanzar posiciones de liderazgo y de avanzar en sus carreras profesionales, sobre todo en países en vías de desarrollo, el auge del comercio electrónico ofrece una oportunidad única para desafiar y superar estas limitaciones.
Emprendimiento como Empoderamiento
El comercio electrónico ha transformado la manera en que hacemos negocios, ofreciendo una plataforma accesible y flexible para emprendedores de todos los ámbitos. Para las mujeres y minorías en América Latina, esta modalidad de negocio representa una herramienta poderosa para sortear las barreras tradicionales del mercado laboral.
Una de las principales ventajas del comercio electrónico es el acceso a un mercado global. Desde la ubicación de los proveedores hasta los clientes, a diferencia de las limitaciones geográficas de los negocios físicos, el comercio electrónico permite a los emprendedores comprar o vender prácticamente a cualquier parte del mundo. Esto no solo amplía las oportunidades de negocio, sino que también reduce la dependencia de las estructuras de poder locales que normalmente mantienen vivo el ‘techo de cristal’[1].
El comercio electrónico también ofrece una flexibilidad que es particularmente valiosa para las mujeres, quienes a menudo enfrentan la doble carga del trabajo y las responsabilidades domésticas. La capacidad de gestionar un negocio en línea desde cualquier lugar y en cualquier momento permite a las emprendedoras equilibrar mejor sus vidas personales y profesionales. Esta flexibilidad para las nuevas generaciones puede ser crucial para quienes buscan avanzar en sus carreras sin sacrificar otros aspectos de sus vidas[2].
Existen numerosos ejemplos de mujeres y minorías en América Latina que han utilizado el comercio electrónico para superar el ‘techo de cristal’. Empresas como Amazon y Mercado Libre han demostrado que es posible construir negocios exitosos en línea, y han inspirado a una nueva generación de emprendedores.
Grandes Oportunidades en Innovación y Plataformas para el Comercio Internacional
Amazon ha sido un actor clave en el comercio electrónico global y ha tenido un impacto significativo en América Latina. La plataforma ha permitido a miles de pequeños emprendedores acceder a mercados internacionales, diversificando sus fuentes de ingresos y fortaleciendo su flujo ventas. Además, ofrece soporte en varios idiomas, lo que facilita la gestión de ventas y el servicio al cliente en cada región. También es esencial mencionar que la empresa ha invertido millones de dólares para ayudar a más de 30,000 vendedores[3] en la región a acceder al comercio electrónico, creando decenas de miles de empleos.
Mercado Libre, con sede en Argentina, es otro ejemplo de éxito para el comercio electrónico[4]. La empresa ha creado una plataforma que permite a miles de micro emprendedores vender sus productos en línea; pero lo más importante: tener visibilidad. Muchas de estas pequeñas empresas son dirigidas por mujeres, quienes han encontrado en Mercado Libre una manera de superar las barreras tradicionales del mercado laboral. La compañía ha invertido significativamente en su infraestructura logística y ha establecido alianzas estratégicas con empresas de tecnología y bancos[5] lo que ha ampliado su alcance y ha permitido ofrecer nuevos productos y servicios a sus clientes.
Nuevos Horizontes, Nuevas Culturas, Nuevos Mercados
El comercio internacional también juega un papel crucial en el empoderamiento de los emprendedores en América Latina. La capacidad de exportar productos a mercados globales no solo aumenta las oportunidades de negocio, sino que también reduce la dependencia de las economías locales, que a menudo están sujetas a fluctuaciones y limitaciones estructurales.
El acceso a nuevos mercados internacionales permite a los emprendedores diversificar sus fuentes de ingresos y reducir el riesgo asociado con la dependencia de un solo mercado. Esto es particularmente importante en América Latina, donde las economías pueden ser volátiles y sujetas a cambios políticos y económicos[6]. Además, el comercio internacional puede abrir nuevas oportunidades para la innovación y el desarrollo de productos, ya que los emprendedores deben adaptarse a las demandas y preferencias de diferentes mercados.
Apoyos e Inversiones
La financiación es otro desafío importante. Muchos emprendedores en América Latina carecen del capital necesario para iniciar y hacer crecer sus negocios en línea. Sin embargo, el auge de las fintech y las plataformas de crowdfunding está comenzando a cambiar este panorama[7]. Estas nuevas formas de financiación están haciendo que sea más fácil para los emprendedores acceder al capital que necesitan.
El acceso a la tecnología es fundamental para el éxito en el comercio electrónico. En muchas partes de América Latina, la infraestructura tecnológica aún es deficiente, lo que limita las oportunidades para los emprendedores. Sin embargo, iniciativas gubernamentales y privadas están trabajando para mejorar el acceso a internet y la tecnología en la región, lo que podría abrir nuevas oportunidades para los emprendedores que conforme crece su negocio, crecen sus necesidades y demanda de tecnología.
Es por el análisis anterior que emprender con Comercio Electrónico demuestra ser una herramienta muy efectiva para lidiar con el ‘techo de cristal’ en América Latina. Al proporcionar acceso a un mercado global, flexibilidad y nuevas oportunidades de financiación, el comercio electrónico está ayudando a mujeres y minorías a superar las barreras tradicionales del mercado laboral. Aunque aún existen desafíos, las oportunidades son inmensas, además de que el futuro de esta industria en la región parece muy prometedor
El constante crecimiento de cuentas individuales que inician una tienda en línea, como manera innovadora de consolidar una idea o de hacer realidad sus proyectos, ha sido determinante para plataformas como Mercado Libre[8], pues la oportunidad de llevar la dirección de tu propio negocio y de plasmarlo en un producto o servicio, ha sido una increíble manera de desarrollar los agujeros que se van encontrando en el mercado y sobre todo de hacer que progrese.
Por último, el éxito en el comercio electrónico no solo depende de la tecnología y la financiación, sino también de la capacidad de los emprendedores para innovar y adaptarse. Con las alianzas adecuadas, el comercio electrónico puede ser una base transformadora para fomentar un mercado laboral más inclusivo y equitativo en América Latina[9].