Observatorio de Política Internacional
Carol Agustina Planckensteiner. Licenciada en Relaciones Internacionales por la Universidad Siglo 21. Córdoba, Argentina.
Moisés Alejandro de Jesús Jiménez Rémanton. Estudiante de Estudios Liberales en la Universidad Metropolitana. Caracas, Venezuela.
Cita sugerida: Jiménez, M. & Planckensteiner, C. (28 de julio de 2023). El aliado estratégico de Estados Unidos en Asia: La República de China. Centro de Estudios Estratégicos de Relaciones Internacionales.
Palabras clave: China, Taiwán, Estados Unidos, neorrealismo.
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Es de público conocimiento que la República Popular China (RPCh) tiene varios conflictos territoriales vigentes, uno de los más importantes es el que mantiene con la República de China, conocido popularmente como Taiwán. Este artículo tiene como objetivo analizar esta cuestión a la luz del neorrealismo, o realismo estructural. Esta teoría de las Relaciones Internacionales basa sus postulados en la estructura del sistema internacional y le otorga importancia a los Estados y sus intereses. A continuación, se hará un breve resumen de la historia de Taiwán, sus intereses y los de Estados Unidos como un actor relevante del sistema internacional, también se mencionará la postura de la RPCh al respecto.
En cuanto a la isla de Taiwán, se encuentra ubicada a 200 kilómetros al suroeste de la China continental, llevando por nombre oficial el de República de China. El gobierno de la República de China usa este nombre en documentos gubernamentales para diferenciarse así de la República Popular China, la cual se encuentra en el continente. Con la derrota de Japón en la Segunda Guerra Mundial el siglo pasado, el territorio de la isla pasó a formar parte de la República de China, fundada por el Partido Nacionalista Chino (Kuomintang o KMT) después de que derrocara a la Dinastía Qing en 1912 (Hsieh, 2009).
La mala administración china en un contexto internacional de gran inestabilidad territorial trajo consecuencias muy negativas para la economía del país, lo cual desembocó en una guerra civil entre el Kuomintang , liderado por Chiang Kai-Shek, y el Partido Comunista Chino (PCC), liderado por Mao Zedong. El conflicto finalizó con la victoria del PCC y la consiguiente huida del Kuomintang a Taiwán en 1949. Esta situación dió pie al actual conflicto entre los dos territorios, puesto que en ese momento el Kuomintang reclamaba el derecho a ser el único gobierno legítimo de China. En el contexto internacional, esa legitimidad se le concedió al gobierno de Chiang Kai-shek hasta 1971, cuando por la resolución número 2758 propuesta por Albania en la Asamblea General de las Naciones Unidas, el gobierno del Kuomintang fue expulsado de la Organización al no ser considerado el gobierno legítimo de China. Paralelamente a esto, muchos países retiraron su reconocimiento internacional a la República de China como único gobierno de este país, aumentando así las tensiones entre los mismos.
A los fines de este análisis, se podría considerar que este suceso marcó, lo que en el neorrealismo se denomina una transformación en la estructura. Porque a partir de este momento la RPCh fue ganando más reconocimiento e importancia, llegando a tener un asiento permanente en el Consejo de Seguridad de la ONU, mientras que Taiwán fue perdiendo alianzas diplomáticas. Esta transformación implica un cambio en las acciones e interacciones de las unidades políticas que, incluso, hasta el presente año siguen cambiando de aliados, principalmente por los beneficios económicos y estratégicos que pueden conseguir de la RPCh a diferencia de Taiwán.
En relación a la República de China en Taiwán, el gobierno que aquí se encuentra ha cambiado con el pasar de los años. Hasta la década de los 70, la legitimidad del gobierno de Kai-shek era innegable, siendo reconocido así como el único gobierno de China. Este gobierno cortaba relaciones diplomáticas con los países que reconocieran al gobierno comunista como el gobierno legítimo; años después esta política también sería aplicada por la RPCh cuando se le fue reconocido su puesto como el representante legítimo del país en la ONU. Los posteriores presidentes de la República de China fueron Chiang Ching-kuo (hijo de Kai-shek) y Lee Teng-hui, quienes fueron unos reformadores que permitieron que se dieran procesos de democratización en toda la isla. De igual manera, muchas de las medidas aplicadas por estos también buscaban un acercamiento con la China continental, tiempo después de que la propia isla rechazase la propuesta del Partido Comunista Chino de “Una China, dos sistemas”, postura que en la actualidad se sigue rechazando. Un ejemplo de esto se puede encontrar en la creación por parte del gobierno de Lee Teng-hui del Consejo para los Asuntos de la China continental y del Consejo Nacional de Unificación, ambos creados en 1990.
Kenneth Waltz, un exponente del neorrealismo, postula que esta teoría, por su naturaleza sistémica, es capaz de describir continuidades de forma atemporal. Para esto necesita dos condiciones, que el sistema internacional sea anárquico y que los Estados se preocupen por su supervivencia. Hasta la actualidad, el sistema internacional sigue siendo anárquico con la presencia predominante de dos Estados, la RPCh y EEUU. Por otro lado, las unidades nacionales siguen priorizando su supervivencia, especialmente en esta cuestión donde encontramos a Taiwán negándose a ser absorbida por la RPCh y a China, por su parte, denunciando la presencia de EEUU en la isla.
En la actualidad, el contexto legal y político de la isla es complicado. Existe una ambigüedad que dificulta una calificación acerca de que es Taiwán, sumado al hecho de que las relaciones de los diferentes Estados con la isla dificultan aún más su clasificación y el estatus propio de Taiwán.
En cuanto a si la República de China puede ser considerada un Estado, hay ciertas consideraciones que hay que mencionar. A nivel legal no es un Estado, pero cumple con criterios como: población, un territorio, y un gobierno independiente (Saul, 2022). Existe un criterio que no cumple, y es la capacidad legal de entrar en relaciones con otros Estados. En la actualidad, sólo 14 países reconocen a Taiwán como Estado, mientras que muchos otros no lo hacen. Los países que no reconocen la soberanía del país y mantienen ciertas relaciones comerciales con Taiwán lo hacen de manera pragmática, a través de una diplomacia no oficial (Saul, 2022).
La importancia económica de Taiwán a nivel mundial es enorme, ya que su industria tecnológica se encarga de producir teléfonos, consolas de videojuegos, computadoras y otros dispositivos electrónicos que son demandados en el mercado internacional. Como se puede ver en la figura 1, la industria taiwanesa que se encarga de hacer los de chips para computadoras produce alrededor del 65% de la producción mundial total.
Figura 1. Figura disponible en el PDF.
Estados Unidos ha sido uno de los países que ha tenido un papel activo en esta ambigüedad entre la República de China y la RPCh. Cuando Taiwán fue expulsado de las Naciones Unidas, el gobierno de los Estados Unidos reconoció a la RPCh como el único gobierno legítimo de China, y consideraba a Taiwán como parte de China. Claro que, después siguió la política australiana de reconocer el reclamo de la RPCh sobre la isla. Estados Unidos busca que el conflicto entre la RPCh y la República de China se resuelva de forma pacífica debido a la cantidad de intereses que posee en la región. Este interés se evidencia en lo que sería la Ley de Relaciones con Taiwán de 1979. Aquí se declara que los Estados Unidos quieren promover y preservar las relaciones comerciales, culturales, y de cualquier tipo entre Estados Unidos y Taiwán. En nuestros días los intereses del país norteamericano van desde el uso de Taiwán como un dique de contención contra China, usar para su beneficio la ubicación geoestratégica de la isla, y la enorme empresa tecnológica del país. En diferentes oportunidades, Estados Unidos ha hecho énfasis en que la unificación entre ambos gobiernos debe ser pacífica, y de no ser así intervendría en el proceso. Hay que recordar que también existe una ley que obliga al país norteamericano a darle armas a Taiwán por una cuestión de defensa.
La RPCh, por su parte, ha defendido acérrimamente el principio de «Una Sola China», el cual estipula que existe un solo gobierno legítimo, el que tiene sede en Beijing y representa a toda la población china. Este es uno de los principios fundamentales de su política exterior, ya que rechaza establecer relaciones diplomáticas con países que reconozcan la existencia de Taiwán como un Estado aparte, o que establezcan relaciones diplomáticas con éste.
Otro principio formulado por Deng Xiaoping y defendido por la RPCh es el de “Un País, Dos Sistemas”, haciendo referencia al socialismo, practicado en China continental, y al capitalismo que impera en Taiwán y Hong Kong, y que a pesar de esta diferencia el país sigue siendo uno solo. Según Deng Xiaoping, este principio resolvería los problemas de administración de Hong Kong y Taiwán, “la reunificación de la patria es la aspiración de toda la nación. Si esto no puede lograrse en cien años lo será en mil. Como lo veo, la única solución radica en el funcionamiento de dos sistemas en un país” (Deng, 1984).
Las Constituciones Nacionales suelen ser los elementos por excelencia para establecer las bases de un Estado, sus principios rectores e intereses. En el caso de la Constitución China de 1928, en el preámbulo se encuentra que “Taiwán es parte del territorio sagrado de la República Popular China. Es el noble deber de todo el pueblo chino, incluidos nuestros compatriotas de Taiwán, cumplir la gran tarea de reunificar la patria”. Por parte de la Constitución de la República de China, no se hace ninguna mención explícita a la cuestión, sin embargo, llama la atención que en los artículos adicionales que fueron agregándose con las sucesivas reformas constitucionales se empieza a nombrar al área libre, haciendo una distinción de lo que fue la República de China y lo que actualmente es. Esta área corresponde a la isla de Taiwán y a las islas administradas por ésta: Pescadores, Kinmen y Matsu.
Pero, sin dudas, lo que genera más controversia en esta región de Asia es el Consenso de 1992. Según un medio oficialista de la RPCh “en 1992, la parte continental de China y la región china de Taiwán llegaron a un acuerdo verbal según el cual ambos lados del Estrecho de Taiwán seguirían el Principio de una sola China” (CGTN Español, 2022). Al respecto tanto Tsai Ing-wen del Partido Progresista Democrático como Chen Ming-tong, presidente del Consejo de Asuntos de China, niegan la existencia de este consenso (Oficina Económica y Cultural de Taipei en el Perú, 2019). Chen también aclara que este Consenso en realidad fueron negociaciones entre funcionarios del Kuomintang y del Partido Comunista Chino donde se estableció un acuerdo tácito por el que se reconocía que solo había una China, pero que cada parte podía interpretarlo a su parecer (EFE, 2019). Por este motivo, la RPCh lo relaciona al principio antes mencionado, que ellos mismos defienden. La población taiwanesa también se manifestó al respecto y, según una encuesta publicada por la Taiwanese Public Opinion Foundation, el 67% no está de acuerdo con lo que plantea este consenso (Asia News, 2023). Por esto, al ser un acuerdo verbal, tácito y negado por muchos, se permite el beneficio de la duda.
Ahora, siendo más explícitos durante la X Asamblea Popular Nacional, en 2005, se promulgó una Ley Antisecesión, donde ya en su primer artículo menciona que “esta Ley está elaborada […] para contener y luchar contra la secesión de Taiwán de China”. Se refuerza la idea de que existe una sola China en el mundo, rechaza la interferencia de fuerzas extranjeras y destaca que la reunificación del país corresponde a los intereses de todo el pueblo chino y taiwanés. Si bien, en gran parte de esta Ley se habla de reunificación pacífica, no se puede pasar por alto el artículo 8, que menciona una serie de escenarios en los que se emplearían medios no pacíficos, a saber: a) las fuerzas secesionistas actúen de cualquier forma para provocar la secesión de Taiwán, b) que ocurran incidentes que impliquen la secesión de Taiwán, c) que las posibilidades para una reunificación pacífica hayan sido completamente agotadas. Ante esto se podría cuestionar qué o quiénes entran bajo la categoría de “fuerzas secesionistas” ¿rebeldes, terroristas, un gobierno elegido democráticamente, una consulta popular?, también cuáles serían considerados como incidentes que involucren una secesión, y finalmente, el último escenario dibuja un límite invisible en lo que implicaría agotar las posibilidades de una reunificación pacífica ¿quién determina ese agotamiento? El Consejo de Estado y la Comisión Militar Central, que, para sorpresa de nadie, se encuentran en el lado continental del estrecho. De esta forma la RPCh busca una reunificación pacífica, pero deja en claro que no descarta el uso de la fuerza.
A través de todos estos principios, leyes y declaraciones queda bien en claro que el interés de la RPCh es el de la reunificación, y legitima su discurso mencionando que es el interés de todo el pueblo chino y taiwanés. Sin embargo, Waltz, postula que el sistema internacional nace de la acción de entidades egoístas que buscan satisfacer sus propios intereses y el principal interés de los actores es mantener su posición en el sistema. Siguiendo este pensamiento, se puede deducir que la RPCh no está velando por los intereses de los taiwaneses sino por los propios, ya que la independencia total de la isla implicaría no solo una pérdida de territorio, sino también de recursos, comercio y supondría una amenaza a su seguridad por la presencia de EEUU como principal socio de Taiwán.
En conclusión, como bien se ha mencionado anteriormente, en la teoría propuesta por Waltz este plantea el concepto de estructura dentro del sistema internacional como una manera de solucionar los vacíos metodológicos que tenía el realismo. A su vez, diversos teóricos habían podido observar que los Estados estaban cada vez más conectados entre sí, por lo que propuestas como la interdependencia compleja y las teorías microeconómicas estuvieron en auge. En el intento de entender esta realidad que se estaba gestando, Waltz hace uso de otras teorías, como por el ejemplo la planteada por Herz, la cual tiene que ver con el Dilema de la Seguridad para explicar cómo el sistema internacional se encuentra en un “equilibrio” que no lo pone en riesgo.
Claro que este complementa su teoría con la caracterización importante de la anarquía del sistema y que los Estados siempre van a velar por su supervivencia. Al momento en que los mismos velan por su supervivencia en un entorno sumamente hostil, estos pueden llevar a cabo acciones tanto hostiles como pacíficas para así alcanzar sus intereses. El poder no es un fin en sí mismo, sino es un medio para alcanzar su seguridad. La búsqueda de seguridad está presente por parte de los Estados Unidos, de la RPCh, y de la autodenominada República de China. Los dos primeros países se han convertido en el referente para hablar de esa lucha de intereses, en donde parte del discurso de cada uno de los bandos es que están velando por su seguridad. Finalmente, para Taiwán no se ve un panorama muy alentador, ya que el incremento de la influencia de la RPCh a nivel internacional y la consecuente disminución de sus aliados diplomáticos hace que sea cada vez menos probable el tan anhelado reconocimiento.
Referencias
Cuándo y cómo China perdió Taiwán (y cuál es el estatus actual de la «isla rebelde»). (2 de enero de 2019). BBC Mundo Internacional. https://www.bbc.com/mundo/noticias-internacional-46736621
Cueto, J. (3 de agosto de 2022). Taiwán: 3 claves para entender su importancia estratégica y económica. BBC Mundo Internacional. https://www.bbc.com/mundo/noticias-internacional-62407544
Constitución de China. Preámbulo. 1982 (China). https://www.bcn.cl/procesoconstituyente/comparadordeconstituciones/constitucion/chn
De los Reyes, M. (s/f) China y Taiwán. Hacia la resolución de un conflicto. Revista de Relaciones Internacionales, (10). https://www.iri.edu.ar/revistas/revista_dvd/revistas/R10/R10-EDEL.html
Deng, X. (22 de junio de 1984). Un país, dos sistemas. Marxists Internet Archive. https://www.marxists.org/espanol/deng/1984/junio22.htm
EFE. (4 de enero de 2019). Taiwán niega la existencia del “Consenso de 1992” con China. La Vanguardia. https://www.lavanguardia.com/politica/20190104/453926028295/taiwan-niega-existencia-consenso-1992-china-reunificacion.html
González, I. (16 de febrero de 2018). Taiwán es una provincia de la República Popular China. Center for global affairs & strategic studies. https://www.unav.edu/documents/10174/16849987/GASS_DT-China-Taiwan.pdf
La mayoría de los taiwaneses no se sienten ‘chinos’ y rechazan el ‘Consenso de 1992’. (19 de abril de 2023). Asia News. https://www.asianews.it/noticias-es/La-mayor%C3%ADa-de-los-taiwaneses-no-se-sienten-%27chinos%27-y-rechazan-el-%27Consenso-de-1992%27-58220.html
Ley Antisecesión de 2005 [Asamblea Nacional Popular]. 14 de marzo de 2005. http://www.chinatoday.com.cn/hoy/37.htm
Oficina Económica y Cultural de Taipei en el Perú (5 de enero de 2019) Taiwán nunca aceptará ‘Consenso de 1992’ https://www.roc-taiwan.org/pe_es/post/17346.html
Saul, B. (16 de Agosto de 2022). Explainer: the complex question of Taiwanese independence. The Conversation. https://theconversation.com/explainer-the-complex-question-of-taiwanese-independence-188584
Un grupo de expertos abordan la historia del «Consenso de 1992». (30 de agosto de 2022). CGTN Español. https://espanol.cgtn.com/n/2022-08-30/HJaacA/un-grupo-de-expertos-abordan-la-historia-del-consenso-de-1992/index.html
Vargas, J. (2009) El realismo y el neorrealismo estructural. Estudios políticos. Novena época, número 16.